David Muñoz logra su primera victoria liderando un triplete español con Quiles y Carpe por detrás del andaluz mientras que Piqueras recorta puntos a Rueda.
David Muñoz firma su primera victoria mundialista en una carrera en el que la caída del rendimiento ha sido clave, Quiles no se asidua al podio en segunda plaza mientras que Carpe sube al podio en tercera posición. Rueda cruza línea de meta en octava posición pese a haber liderado gran parte de la carrera.
La noticia del domingo era la baja de Adrián Fernández tras lesionarse el dedo pulgar durante los entrenamientos de ayer sábado y se verá intervenido este mismo martes en Barcelona. La baja importante dejaba a los dos primeros del mundial frente a una lucha cara a cara con Kelso siguiéndoles de cerca. Rueda seguía con la senda de los buenos resultados tras la victoria desde última posición en Silverstone llegaba la pole en Aragón, que auguraba un intento de romper el grupo desde el primer momento.
El intento de romper el grupo
La salida limpia sin ataques hacia el líder hacía que Rueda tuviese pista libre para intentar el primer tirón y romper el grupo mientras que por detrás Piqueras empezaba a remontar posiciones desde la décima posición. Llegaba el primer incidente de carrera en manos de Vicente Pérez quien al caer se llevaba con él a Stefano Nepa. El grupo que después de cinco vueltas seguía siendo muy nutrido, los cuatro primeros parecían empezar a abrir un pequeño hueco sobre un segundo grupo liderado por Carpe y en el que se encontraba Piqueras.
Carrera sin ataques desde el inicio
Las primeras vueltas dejaban claro que la carrera iba a ser de estrategia, sin muchos adelantamientos entre los pilotos del grupo de cabeza. Empezaban a llegar los problemas en Rouston con un fallo mecánico y en un susto en Almansa que le relegaba a la quinta posición haciendo que ese pequeño hueco entre los dos grupos se eliminase por completo y pasase a ser un único grupo de nueve pilotos.
La estrategia de no atacarse empezaba a cambiar a falta de siete vueltas para el final con lo que parecía una caída del rendimiento del neumático con los tiempos siendo mucho más lentos, hecho que favorecía que aún se agruparan más pilotos. Rueda seguía comandando la carrera pero defendiéndose de los intentos de adelantamiento por parte de David Muñoz. Pocas vueltas después llegaba el primer cambio de líder en toda la carrera, siendo Lunetta el nuevo líder.
Cambio de estrategia
El primer cambio de líder cambiaba la estrategia que se había planteado durante la carrera. Rueda pasaba de primero a sexto tras un pequeño toque con Quiles. La caída del rendimiento del neumático era clara y los pilotos empezaban a sufrir en pista intentando sobrevivir. Los adelantamientos se hacían protagonistas al final de carrera en el intercambio constante de posiciones. Quiles cogía las riendas de la carrera mientras le llegaba el aviso de pisar el verde.
Muñoz y Quiles se intercambiaban las posiciones durante la última vuelta mientras que Rueda perdía muchas posiciones. La gestión hasta la última curva llegaba a ser clave para todos ellos. Un adelantamiento por dentro de Muñoz le daba la primera victoria de su vida, con Quiles segundo y Carpe ‘in extremis’ tercero. Por detrás Rueda finalizaba octavo pese a ser el claro favorito.
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