El catalán ha sido el gran damnificado del paso de Pedro Acosta a MotoGP y reconoce haber pasado por todos los estados anímicos.
Una de las claves del trabajo en equipo es saber entender cuando tu ayuda es necesaria o cuando es mejor echarse un lado. Probablemente si hay una persona que entienda a las mil maravillas de que se trata todo esto es Pol Espargaró, que junto a KTM hace ya siete años crearon ese equipo que hoy en día es capaz de luchar por victorias. Un trabajo de cero entre la marca austriaca y el menor de los Espargaró, mano a mano, que ha desembarcado en uno de los mejores equipos de la categoría reina y que continúa su proceso para llegar a liderar la categoría reina.
Precisamente en ese proceso de crecimiento, los de Mattighofen han tenido que jugar sus cartas, ascendiendo a uno de sus diamantes en bruto, Pedro Acosta y dejando atrás a uno de los suyos, Pol Espargaró. Una decisión que pese a haber sido bilateral deja a un Espargaró tocado. “Como soy más mayor, más maduro, puedo dar un paso hacia atrás, pensar, y después contestar a estas cosas de la manera adecuada. Pero por supuesto que pasas por todos los estados anímicos“, reconocía este jueves en el previo del Gran Premio de Indonesia.
Y más si tenemos en cuenta que tras romperse siete huesos, Polyccio acortó una vuelta que en los primeros instantes se pensó que se alargaría hasta final de temporada y que quedó resumida en apenas dos meses. “Por supuesto que me gustaría seguir compitiendo el año que viene, porque siento que todavía soy rápido. No lo soy tanto como me gustaría ser, pero también he estado fuera mucho tiempo y la moto ha cambiado mucho y está claro que no he tenido el tiempo suficiente para ser lo rápido que quiero. Y con todo esto creo que he demostrado ser lo suficientemente rápido. Pero las cosas van así. Tengo que aceptar esto de manera madura, no como un niño y lloriquear, tengo que asumir este capítulo nuevo de mi vida de la mejor manera posible, de la forma más positiva y proactiva y es la única manera en que puede funcionar para las dos partes“, añadía.
Su nuevo papel en KTM
Pero lo cierto es que si hay una característica que siempre ha caracterizado al menor de los Espargaró es la de tomarse con actitud todos los procesos de su vida, que no han sido pocos. “Es lógico y normal que apuesten por Pedro (Acosta NdR), es un piloto con mucho talento y diría que de todos los errores que ha habido en la fábrica durante este tiempo, que han sido muchos, el proyectar a Pedro hasta MotoGP es el menor de ellos. Es algo normal y natural proyectar a un piloto con su talento, que tenía que estar en esta fábrica apoyado de la manera en la que está apoyado. Y no hay otra manera de apoyarlo que estar en MotoGP lo antes posible, porque tiene mucho talento y hay que aprovecharlo“.
A partir de la temporada que viene, Pol pasará a formar parte del equipo de pruebas de la marca austriaca, con 10 wild cards y un papel importante en el desarrollo de la escudería. “Quizás lo que más me llena es el acuerdo al que hemos llegado para el futuro de estar relacionado con la marca más allá del año que viene, con distintas posiciones dentro de la fábrica. Aún tenemos algunas ideas y algunos planes estructurales a definir de cómo va a ser mi futuro, que no es tan fácil. En las próximas temporadas voy a estar relacionado con la competición“, asume.
Aunque no descarta volver a competir al 100%. “En 2025 la fábrica quiere tener alguna moto más en la parrilla de salida y vete a saber, la vida da muchas vueltas. Las puertas están bastante abiertas para el futuro así que es importante seguir siendo competitivo y seguir estando activo en las carreras“, confesaba.
Foto: Redes sociales
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