Marc Márquez ha debutado hoy con el Gresini y ha recuperado la sonrisa que se le había ido hace ya mucho tiempo.
El ambiente hoy en Valencia ha sido muy diferente al de este fin de semana. Hoy la melancolía ha dejado paso a la ilusión y el nerviosismo. El causante de todo esto tiene nombre y apellido: Marc Márquez. A primera hora de la mañana los focos se empezaban a congregar en el box del Gresini, tras once años corriendo con Honda, el catalán se iba a estrenar con una Ducati. Poco antes de que llegara el piloto era Nadia Padovani, CEO y propietaria del Gresini Racing, quien aparecía en escena.
Unos minutos más tarde, por fin, llegaba Márquez, con rostro serio. La expectación era brutal. Y, a pesar de que las motos empezaban a rugir cerca de las 10:00 de la mañana en el circuito de Cheste, no era hasta una hora más tarde cuando el español hacía su primera salida a pista. Una primera tanda de reconocimiento, las primeras ocho vueltas a lomos de la Ducati, en la séptima llegaba el mejor tiempo, se colocaba tercero.
Vuelta al box. Todos esperando ver la cara que se escondía tras el casco. Y, por fin, vuelve la sonrisa de Marc Márquez. Hacía mucho que no veíamos al catalán bajarse de la moto con una sonrisa en la cara, quizás desde antes de la lesión que cambió el rumbo de su carrera. Una hora después de la primera tanda, llegaba la segunda. Nueve vueltas, sin mejorar el tiempo, pero las cosas de palacio van despacio y hoy es día de reconocimiento y adaptación a esta nueva moto.
Sin embargo, no había pasado una hora cuando Márquez volvía a salir a pista. La tercera tanda. El catalán sabe que las cosas van despacio pero tiene mentalidad de Campeón y eso no se puede negar. Ahora sí, menos vueltas pero más eficientes. Cinco vueltas que le han permitido bajar su tiempo y meterse segundo, por detrás de Maverick Viñales. Marc Márquez, primer día pilotando la moto del Gresini y mejor Ducati en parrilla, por delante de Jorge Martín y lejos de Pecco Bagnaia.
Y llegaba la hora de la verdad, a falta de una hora y media para el final de la sesión, Marc Márquez marcaba el mejor tiempo, 1:29.460, un claro mensaje a sus rivales que este invierno tendrán el fantasma del piloto catalán.
Foto: Jose Carlos Jiménez (Piel de Asfalto)
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