El piloto de Gresini afronta el GP de la República Checa tras su heroico segundo puesto en Alemania, todavía convaleciente de una fractura en el dedo y con el foco puesto en conservar su posición en el Mundial.
Alex Márquez aterriza en el Gran Premio de la República Checa como el segundo clasificado en la general del campeonato del mundo de MotoGP, tras una exhibición de coraje el pasado fin de semana en Sachsenring. Pese a competir con una reciente fractura en el dedo corazón de la mano izquierda, el piloto de Gresini Racing logró un valiosísimo segundo puesto que no solo le consolidó como aspirante al título, sino que le permitió ampliar su ventaja sobre Pecco Bagnaia.
“De dos a tres semanas no cambian mucho para una fractura. Han pasado solo cuatro días desde Sachsenring, pero el martes me hice un control médico y el hueso está bien, no se ha movido nada“, explicaba el piloto de Cervera este jueves en la previa del GP. A diferencia de la mayoría de sus compañeros, Alex decidió volver a Madrid para continuar su recuperación, una estrategia que parece haberle funcionado.
Consciente de sus limitaciones físicas, Alex Márquez se plantea el fin de semana en Brno con realismo y prudencia. “La mentalidad es la misma que en Alemania: minimizar los daños y perder los menos puntos posibles respecto a Marc y Pecco“, asegura el pequeño de los Márquez, quien reconoce que el trazado checo representa un reto distinto al del fin de semana pasado. “Sachsenring me ayudó un poco porque es un circuito más de fluir; aquí hay frenadas más potentes y seguramente sufriré un poco más“.
🔙 La última vez, su temporada de debut en MotoGP
El catalán apenas tiene experiencia con la MotoGP en Brno. Su última carrera en este trazado fue en 2020, en su temporada de debut en la categoría reina y en condiciones muy distintas. “Fue una situación complicada, con la Honda, y acabé 15º a casi 25 segundos del ganador“, recuerda.
A pesar de todo, Alex Márquez no descarta ninguna posibilidad: “No esperaba terminar segundo en Alemania, y aquí iremos sesión a sesión. Veremos si estoy en condiciones de pelear por ganar o por terminar entre los diez primeros“.
Con la determinación que le ha caracterizado en las últimas citas, Alex vuelve a subirse a la moto dispuesto a dar guerra, a pesar del dolor y de las dudas físicas. Su objetivo: seguir sumando puntos y mantener intactas sus opciones al título de MotoGP 2025.
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