El expiloto de Aprilia y actual probador de Honda aclara su postura en medio de la polémica sobre la posible salida de Jorge Martín del equipo de Noale.
Aleix Espargaró se retiró oficialmente a finales del pasado curso, dejando atrás una etapa histórica en Aprilia con un legado grabado en la piel: un tatuaje con el lema Il Capitano, el mismo que lucía en el box de Noale y que simboliza su liderazgo en una era dorada para la fábrica italiana. Fue él quien les regaló su primera victoria en MotoGP, y con eso se marchó en paz. O casi. Porque cuando parecía que su papel en la categoría se limitaría al desarrollo de la Honda como piloto probador, la actualidad volvió a cruzar su nombre con la turbulenta relación entre Jorge Martín y Aprilia.
Desde Silverstone, donde disputa su segunda carrera como ‘wild card’ esta temporada tras reaparecer en Jerez, Espargaró no ha podido esquivar el tema que lo vuelve a situar en el centro del paddock. La noticia de que Martín busca romper su contrato con Aprilia al final de 2025 y la sospecha de un posible interés por parte de Honda —marca con la que Aleix colabora actualmente— ha generado todo tipo de teorías. Algunas de ellas apuntan incluso a una supuesta influencia del propio Aleix en el movimiento del actual campeón.
Pero el catalán ha sido tajante: “Yo apreté muchísimo para que Jorge firmara por Aprilia, apreté a ambas partes. Pero ya os puedo garantizar que no le he dicho a Jorge que fiche por Honda”. Su vínculo con el madrileño es estrecho dentro y fuera de pista, y precisamente por eso quiso zanjar cualquier especulación que lo señalase como artífice en la sombra de esta posible fuga.
Las mejoras en Honda
A pesar de haber colgado el mono como piloto oficial, Espargaró sigue muy atento a la evolución de Aprilia y no esconde su deseo: “Mantengo que la segunda mejor moto de la parrilla es la Aprilia. Y no puede haber nada que me haga más ilusión que ver a Martín triunfar con ellos”. Mientras tanto, su trabajo en Honda no se detiene. Aleix se ha centrado en mejorar la tracción de la RC213V y en combatir las persistentes vibraciones que afectan al chasis de la moto japonesa, un problema compartido por varias marcas pero especialmente acusado en HRC.
“Tenemos mucho material. A ver si la mejora de motor y el basculante de carbono funcionan, y podemos reducir las vibraciones. Hicimos un gran cambio del motor que pensábamos que nos daría un salto, pero no fue del todo así”, explicó, con la franqueza que siempre le ha caracterizado.
El triunfo de Johann Zarco
También tuvo palabras para Johann Zarco, el inesperado protagonista de Le Mans tras lograr su primera victoria en MotoGP con Honda, un triunfo que rompió años de sequía para LCR y para la fábrica del ala dorada. “Es verdad que a una victoria en mojado nadie le da el mismo valor que a una en seco. Pero una victoria es una victoria, y aquella es un bálsamo para Cecchinello, para Johann y para Honda”, sentenció Aleix.
Aunque ya no esté en la lucha por los títulos, su voz sigue teniendo peso en el paddock. Su pasado con Aprilia, su relación con Martín y su presente con Honda lo convierten en una figura clave en este puzle que puede cambiar el mapa de MotoGP de cara a 2026. Lo que está claro es que, al menos públicamente, Aleix quiere mantenerse al margen.
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