Marc Márquez lidera con puño de hierro el Mundial de MotoGP 2025. El piloto del Ducati oficial ha ganado 9 de las 12 carreras y asegura sentirse fuerte en todas las condiciones.
Marc Márquez ha vuelto en esta temporada de MotoGP 2025. Y lo ha hecho en su versión más letal. El piloto de Cervera está protagonizando un Mundial 2025 casi perfecto, en el que ha conseguido nueve victorias de doce posibles, entre carreras largas y Sprint, y un segundo puesto como único podio que no ha sido en lo más alto. Solo los errores cometidos los domingos en Austin y Jerez le han impedido firmar una temporada prácticamente inmaculada.
Ese dominio le permite liderar con claridad el campeonato, con 22 puntos de ventaja sobre su hermano Álex Márquez, el piloto del Gresini Racing que se ha convertido en su principal rival en la lucha por el título.
La Ducati GP25: el arma definitiva
Más allá de los números, lo que realmente satisface al ocho veces campeón del mundo es la versatilidad de su moto. “La Ducati GP25, o GP24.9 como dicen algunos, me permite ir fuerte en todo tipo de condiciones”, ha asegurado el catalán. Y no es para menos: Márquez ha sido competitivo en seco, mojado, condiciones mixtas, y en circuitos de todo tipo, desde trazados revirados hasta los más veloces.
La prueba definitiva llegó en Qatar, un circuito históricamente complicado para él. Allí se impuso con autoridad tanto en el Sprint como en la carrera larga, demostrando que incluso sus “puntos débiles” han dejado de serlo: “Después del GP de Qatar ya no me asusta ningún circuito”, proclamó con una mezcla de confianza y desafío.
La presión, para Álex
Pese a su dominio, Márquez ha querido trasladar parte de la presión al segundo clasificado del campeonato. Y no es otro que su propio hermano, Álex. “Silverstone es un circuito que se le da muy bien a Álex. Será interesante ver cómo va ahí. Nosotros intentaremos estar delante, pero el objetivo principal será confirmar las mejoras que probamos en Jerez y Francia”, explicó Marc, consciente de que el trazado británico representa una prueba muy distinta.
Para el dorsal 93, Silverstone será clave para evaluar si su ventaja se mantiene en un circuito menos favorable a su estilo habitual, pero el mensaje es claro: no hay temor. “Claro que llegarán circuitos donde me costará más, pero ya no llego con miedo. Lo veré el viernes en pista, no antes”.
El objetivo: conservar la ventaja
El plan de Márquez es evidente: no dejar escapar puntos tontos como los de Austin y Jerez, donde errores propios le impidieron sumar. Pero con una moto competitiva, confianza al máximo y una mentalidad férrea, Marc parece más preparado que nunca para recuperar el trono de MotoGP. Y de momento, el resto solo puede mirar cómo se aleja en la general.
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