El catalán vuelve a subirse a su Honda tras tener que perderse las últimas citas por lesión. “Tengo muchas ganas de volver a ver a todo el equipo Repsol Honda y entender el trabajo que se ha hecho durante el parón”.
Después de cinco semanas de descanso, este fin de semana el Mundial de MotoGP volverá a ponerse en marcha con su cita británica en el circuito de Silverstone. En el caso de Marc Márquez, volverá a subirse a su Honda después de tener que perderse las dos ultimas carreras por lesiones tras irse al suelo en Alemania hasta en cinco ocasiones- la última tuvo como resultado una fractura en uno de los dedos, una contusión en el tobillo y una fractura en una costilla, la que le impidió correr en Assen-.
Antes de las vacaciones, el octacampeón del Mundo reconoció estar viviendo uno de sus peores momentos deportivos, sin contar la lesión de húmero que le complicó las últimas temporada. “Necesito parar, rehacerme“, confesaba entonces el catalán. Cinco semanas han sido suficientes para descansar y preparar la segunda parte de la temporada. “Hemos disfrutado de unas importantes vacaciones de verano, una oportunidad para reiniciar y recuperarnos después de un comienzo de año exigente. Desde el punto de vista físico y mental, vuelvo a la pista renovado y listo para trabajar“, reconoce el catalán en el comunicado difundido por su equipo.
Una temporada complicada
Lo cierto es que esta está siendo una temporada para Márquez. Desde el inicio, el catalán solo ha conseguido puntuar en dos sprint y ninguna carrera larga, además de todas las lesiones que ha tenido que afrontar en apenas ocho carreras. La situación que atraviesa Honda está complicando la vida a sus pilotos que en esta primera mitad de año han tenido que perderse el 50% de las carreras disputadas. ¿El problema? Una Honda indomable con ADN en los famosos highsides, las caídas por orejas.
“Tengo muchas ganas de volver a ver a todo el equipo Repsol Honda y entender el trabajo que se ha hecho durante el parón”, expresa. La marca del ala dorada esta trabajando para encontrar una solución a sus problemas. Sin ir mas lejos, hace unos días, Bradl cumplió con dos jornadas de test en Misano y Jerez donde pudo probar distintas configuraciones en la RC213V. Además, desde este fin de semana, la categoría reina contará con un nuevo reglamento de presiones que podría servir de ayuda a las marcas niponas.
Todo este trabajo podrá verse este fin de semana en Silverstone, la primera cita tras el parón veraniego, un circuito en el que ya sabe lo que es ganar. “Silverstone es un circuito en el que he tenido muchas buenas batallas en el pasado. Lo más importante es volver a subirme a la moto, volver al trabajo e intentar mejorar lo que ha sido la primera mitad del año”, concluye.
Foto: Jose Carlos Jiménez- Piel de Asfalto
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