Franco Morbidelli insinúa un posible pacto entre los pilotos italianos para contrarrestar la estrategia conjunta de Marc y Álex Márquez, líderes del Mundial.
La temporada 2025 de MotoGP está dejando muchas historias, pero ninguna tan clara como la que escriben semana a semana los hermanos Márquez. Marc y Álex lideran el campeonato con números sólidos, con victorias, podios y una regularidad que está poniendo en apuros incluso al mismísimo Pecco Bagnaia. Pero más allá de lo evidente, hay una táctica que empieza a levantar cejas en el paddock: los Márquez se ayudan. Y eso, en un Mundial tan apretado, puede marcar la diferencia.
Durante el pasado Gran Premio de Qatar, Franco Morbidelli no se mordió la lengua. El piloto italiano del equipo VR46, beneficiado por la sanción de Viñales que le aupó a la cuarta plaza, lanzó una advertencia pública: “Durante los fines de semana de carrera, efectivamente, Marc y Álex parece que se ayudan y se dan rebufo. Esta actitud puede ayudar, así que si lo hacen los rivales…”. Morbidelli no estaba insinuando. Estaba sugiriendo una estrategia colectiva: que los pilotos de la Academia de Valentino Rossi comiencen a jugar en equipo.
Hermandad Márquez vs. Fraternidad VR46
La idea es simple, pero poderosa: trabajar unidos. Lo hacen los Márquez, y con resultados a la vista. Marc ha sido implacable en las Sprint y Álex, más constante que nunca, está solo un punto por detrás de su hermano en la clasificación. No se trata solo de talento: se trata de colaboración. “Con los chicos de la Academia no somos hermanos de sangre, pero nos hemos ayudado mucho y todavía lo hacemos entrenando”, añadía Morbidelli, que ve claro el próximo paso: formalizar esa ayuda también en pista. Darse rebufos, colaborar en entrenamientos y clasificatorias, compartir datos. Imitar, en esencia, lo que los Márquez hacen sin disimulo.
“Ganar a Marc requiere un fin de semana perfecto”
Morbidelli también dejó claro que el nivel de Marc Márquez es ahora mismo una referencia. “La forma en que Marc ha empezado la temporada con la Ducati oficial es realmente increíble. Consigue interpretar a la perfección cada aspecto del fin de semana de carrera, por eso para ganarle hay que hacerlo todo perfecto”, explicó. En un campeonato donde la igualdad técnica crece —KTM, Yamaha y Honda ya se acercan más a Ducati—, la diferencia puede estar en los pequeños detalles. Y ahí, la ayuda mutua entre pilotos del mismo entorno podría marcar un antes y un después.
La ambición de Morbidelli y el VR46 no es baja: “Luchar por las primeras cinco posiciones es muy difícil y para lograrlo es necesario hacer un trabajo perfecto”, dice el italiano. Y si ese trabajo incluye jugar en equipo, como los Márquez, el Mundial podría convertirse en una batalla de clanes.
El Mundial, más fraternal que nunca
No es la primera vez que la cooperación entre pilotos levanta polémica o admiración, pero pocas veces ha sido tan visible. Si algo ha demostrado este inicio de 2025 es que la hermandad, literal o figurada, puede marcar la diferencia en la era más igualada de MotoGP. ¿Será la unión de la VR46 suficiente para frenar a los Márquez? ¿Estamos a las puertas de una guerra de escuadras dentro del campeonato? Las próximas carreras dirán si el paddock se convierte en una partida de ajedrez... con peones que ya no quieren jugar solos.
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