De un golpe y bandera roja en la FP2 a una vuelta perfecta en Q3: George Russell lidera a Mercedes en Marina Bay, con Verstappen a su estela y Antonelli cuarto en su mejor sábado.
George Russell convirtió un viernes gris en un sábado de oro. Doce horas después de un accidente que provocó bandera roja y le dejó prácticamente fuera de la FP2, el británico encadenó tres sectores quirúrgicos en Marina Bay y se llevó la pole position con autoridad frente a Max Verstappen, sellando su segunda pole del año y reivindicando el paso adelante de Mercedes en alta carga aerodinámica.
“Sienta muy bien estar en la pole. Ayer fue un día realmente duro por muchas razones, pero es bueno volver así y conseguir un resultado como este”, resumió Russell, aún con la adrenalina de una vuelta que no admitió réplica. “Mañana será una carrera larga y sudorosa, pero sabía que había potencial en el coche para esto”.
🚩 De la bandera roja al ‘vueltón’: la metamorfosis del W15 en Marina Bay
El viernes dejó dudas: falta de ritmo, un error que acabó contra el muro y un tiempo de garaje que complicó toda la hoja de trabajo. Sin embargo, el trazado urbano recompensó a Mercedes cuando la pista evolucionó y el equipo encontró ventana de neumáticos y altura de rodaje en la Q2. En Q3, Russell se liberó: preciso en frenada, tracción limpia y un sector final sin correcciones que le valió la pole con margen.
La actuación llegó acompañada por el gran sábado de Andrea Kimi Antonelli, cuarto en la parrilla tras un primer intento sobresaliente: “Kimi ha hecho un trabajo increíble todo el fin de semana. Ayer me dio muchísima confianza ver lo que puede hacer con este monoplaza”, admitió George, poniendo en valor el papel del joven italiano.
🤔 Gestión, salida y estrategia: las claves del domingo
Marina Bay es asfalto de alta severidad térmica y poca degradación mecánica, pero con temperaturas de neumático traicioneras: quien fuerce de más el delantero derecho pagará en el último tercio. La salida será medio GP: Russell parte en el lado limpio, pero mira por los retrovisores. “Verstappen es muy bueno en las salidas y un maestro atacando por el interior. Tendré que tener cuidado”, dijo el poleman.
El Safety Car es casi una tradición en Singapur: abre la puerta a undercut agresivo si hay aire limpio o a overcut si el líder controla ritmo. Mercedes trae dos balas estratégicas con Russell delante y Antonelli en segunda fila para cubrir undercuts de McLaren y la presión de Red Bull.
🧘 Un Russell más cauto… y más maduro
“Singapur no ha sido generoso conmigo en el pasado, sobre todo por mi culpa. No me voy a dejar llevar por estar en la pole; iré con cabeza”, cerró el británico. El mensaje destila una versión más madura de Russell: rápido a una vuelta, pero también consciente de que en Marina Bay mandan la paciencia, la gestión y el error cero.
Si Mercedes reproduce el equilibrio de Q3 y clava decisiones en el muro, el primer triunfo del curso está al alcance. El resto lo dictará la primera frenada… y el imprevisible guion de Singapur.
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